Cuando desmonté la empuñadura rota de la gladius que me dio un amigo para reparar lo vi claro, esa es la forma de hoja adecuada.
Así que agarré las gladius de madera dispuesto a reformarlas.
Superponemos la de hierro a la de madera.
Marcamos con rotulador la forma de la hoja de hierro.
La sujetamos bien y con la caladora la recortamos.
Perfecto, la siguiente fase....
...es la lima, muchas pasadas variando el ángulo para biselar los filos.
Y acabamos lijando bien para rematar las imperfecciones de la lima.
Finalizamos repasando los filos y toda la espada con aceite de linaza, recordad que es de roble y para usarla es mejor que esté ''hidratada''.
La dejamos reposar unos días para que la madera absorba bien el aceite. Reforma terminada satisfactoriamente, la forma de la espada es ahora infinitamente mejor que antes.
¡¡Bartooo!! ¿ las usamos para atizarnos una noche en fiestas??
Pues claro! cuando quieras!. Parece por la hoja una Mainz, es ta muy guapa. El tema de las espadas de madera, por lo que he visto en la recreacion lo suyo es coger un tablon gordo de madera y moldear la rudis desde ese tablon siendo empuñadura y hoja un todo, por lo que es muy dificil que se astille y se parta, aunque no sea tan estilizada, es dura y pesada que es lo que se intentaba con estas espadas. Un saludo!
ResponderEliminarYo de momento la pongo en venta, como todo lo que hago, y luego ya veremos.
ResponderEliminarAsí es como las hice, de una pieza y rebajando la madera hasta darle la forma y grosor deseado. Hoy he reparado los escudos que usamos en nuestro combate, estaban rajados, ya los verás aquí.
Un saludo camarada.