Tomamos como modelo una pitillera y la copiamos descaradamente.
Hacemos las piezas con foam, para ver si todo va bien, antes de cortar cuero.
Dibujamos las piezas en el cuero una vez comprobado todo.
Y en la alfombrilla de corte cortamos las piezas, obiamente.
Tras marcar la línea pasamos la ruleta.
Y después taladramos las piezas con el punzón y el martillo de nylon.
Todo taladrado y preparado, podemos empezar.
Las caras interiores enfrentadas, haremos un cosido cruzado que queda muy chulo y fuerte.
Primer tramo cosido, antes hemos oscurecido ligeramente los filos con el trapo sucio de betún de judea.
Doblamos y a coser igual que antes.
Perfecto, ya va tomando forma.
Por el otro lado repetimos la operación con el otro lateral.
Este cosido cruzado se hace con dos agujas, una en cada extremo del hilo y con cuidado de no equivocarte en ninguna puntada o no quedará bien.
Marcamos la tapa con un método supersotisficado.
Perfecto, hay que acordarse de oscurecer el filo en ese punto.
Con las herramientas nuevas de poner polleras, asi es como se llaman estos cierres en Cartagena, vamos terminando la pitillera.
Ahora marcamos y taladramos toda la tapa y el filo de la entrada de la pitillera.
Y hacemos el mismo cosido que le hicimos al bolso, para que queden totalmente a juego.
Ya estamos terminando.
He aquí el resultado.
Ahora una pasada de grasa de caballo...
....y sirvase acompañado de un solomillo de cerdo al vino blanco con queso curado y regado con un buen rioja de crianza del 2006 y de postre fresas con cava y chocolate negro para tener una noche...romántica y al día siguiente una resaca de aupa, como la que tengo mientras hago esta entrada...feliz San Valentin. ( Lo envolví yo, que pasa? )