Observar lo que hace el peso de la espada colgada del arnés.
Terminamos de abrir bien para reforzar la zona.
Cortamos una lámina metálica fina y un pedazo de cuero de la medida del arnés.
Ponemos la lámina metálica, untada de cola blanca, entre el cuero y el forro del arnés.
También untamos de cola el cuero.
Un trozo de madera debajo.
Y otro arriba, tipo sandwich.
Sujetamos con gatos un par de días.
Perfecto, bien sólido y pegado, no hace falta coserlo.
Por delante se ve bien, ahora está firme, no hay arrugas ni se ve roto, ok.
Saludos paisano, acabo de empezar en esto del la armería y los contenidos de tu blog me parecen muy interesantes, aunque tengo que decirte que yo me decanto más por los Romanos o por los Iberos jejeje.
ResponderEliminarTe pongo mi blog por si te apetece un intercambio de enlaces:
http://elarmerohistorico.blogspot.com/
Saludos
Saludos amigo armero, gracias por tu comentario, a mi tb me gustan los romanos, griegos e íberos, aunque sea carthaginés, jeje. Por supuesto que puedes poner el enlace y yo haré lo mismo. Si de verdad quieres aprender a hacer cosas mira el blog el blindado personal, de Axil, es mi sensei. Un saludo
ResponderEliminarMuchas gracias compañero, ya estás en mi lista.
ResponderEliminarSaludos